Entradas

Mostrando las entradas de junio 22, 2008

YouTubeando a Carlos Ponce =D

Y bueno… ya mejor de ánimo estoy aquí xD. Toda esta “conmoción emocional” me ha ayudado mucho ¿saben? Resulta que estaba medio estancada en la escritura, pero gracias a esa necesidad inherente de “no pensar”, he dedicado mi tiempo a continuar con la nueva (vieja y eterna) novela que estoy escribiendo. Sip, la misma, la de hace 10 años, la que parecía no tener ni introducción, ni nudo, ni desenlace ¬¬ (¡Pobre de mí! Tantos personajes en la cabeza y los parecían no tener destino los condenados). Ahora que la historia ha cogido forma y hasta nombre tiene (Lo cual me hace muy feliz, pero sigue siendo sorpresa xD), pues he retomado el ritmo de escritura de la misma. Pero para esto, he requerido de una pequeña ayuda. Si, bueno, esto es un poco loco pero resulta que el protagonista de esta historia tan enredada, el tan querido más nunca bien ponderado Felipe Serrano y sus chocoaventuras tienen rostro desde siempre. En mi cabecita creadora no hay ni habrá jamás un Felipito más perfecto que el

Y vuelvo otra vez... ¡Todo es tan cíclico! ¬¬

Una vez más, ¿qué tiene eso de nuevo?... una vez más en contravía de mis propios instintos, sólo un vuelco más, sólo una noticia más, quizás... Lo fantástico de esto es, que a estas alturas del partido, no me siguiera doliendo, pero la realidad es muy diferente. Señoras y señores, la reina del drama entra otra vez a escena, se abre el telón, la gente aplaude; todos me conocen. ¡Bingo! Aquí estoy, sí, yo, la que pretende verse fuerte siempre, la que ha tratado de engañar al universo entero con su farsa de tranquilidad, serenidad, paciencia y mucha mucha tolerancia. Si esto no es amor, si no es dolor de ausencia, si no es la música del silencio lo que estoy oyendo... ¿qué es? ¿quién soy yo y a què juego? Lo sé, ya no debería doler, no debería, o mejor aún yo no debería hacerme daño (a veces parece que lo disfrutara ¬¬), la curiosidad engaña y luego cubre de sal un puñal para rozar el más mínimo centrimetro de mi piel... ¡Wow! El masoquismo en su máxima expresión. Bueno, espero al menos q